El problema no es la dieta. El problema es tu mente

Tu mente siempre escoge el camino fácil. No le gusta pensar, sólo le da vueltas a pensamientos que ya existen. No le gusta la lógica, sino que graba aquellos acontecimientos que le hayan causado mucha emoción, ya sean emociones negativas o positivas. Pero sobretodo las negativas, necesita grabarlas para no volver a repetirlas. Es un mecanismo de supervivencia, pero que aveces es exagerado. Y mientras no comprendas esto (no entenderlo sino comprenderlo) seguirás diciendo "Ajá, ya lo sé" y seguirás haciendo lo mismo una y otra vez. De hecho, este artículo será otro más de los tantos que has leído.

Hemos avanzado mucho como humanidad a lo largo de la historia. Pero no te confundas, hemos
avanzado mucho a nivel científico y tecnológico. Hay muchas aplicaciones, muchas redes sociales, carros eléctricos, y un largo etcétera. Pero si nos vamos por el tema de autoconocimiento o emocional, te diría (sin miedo a equivocarme) que seguimos en la época de Antes de Cristo. Muchas personas no saben lo que quieren, no saben por qué trabajan, por qué estudian una carrera, por qué tienen hijos, por qué se casan, por qué emigran de país, por qué hacen dieta, por qué les duele algo. Simplemente hacemos las cosas porque los demás lo hacen. Confundimos "educación" con "programación". Tenemos mucha tecnología pero seguimos siendo infelices. Nos mudamos de país pero seguimos siendo infelices. Nos casamos o tenemos pareja pero seguimos siendo infelices. Estudiamos una carrera pero seguimos siendo infelices. En fin, aún no sabemos quienes somos. Y en lugar de detenernos a pensar el por qué somos como somos, preferimos evadir y seguir corriendo para no pensar. Seguimos estudiando más, trabajando más, procreando más y consumiendo más.

Quizá pienses que estoy loco por lo que acabo de escribir. Y es precisamente lo que te mencioné al principio: para la mente es muy difícil aceptar cosas nuevas. Está programada para seguir haciendo lo que siempre ha hecho. Por eso te dirá que estoy loco y por qué un nutricionista habla de esto. Si por el contrario, piensas que tengo un poco de razón, igual eso no cambia nada. ¿Conoces personas que piensan de una determinada manera y hacen exactamente otra cosa? También es porque a nivel consciente puedes afirmar algo pero debajo de la superficie, en tu subconsciente, es donde se gesta lo que realmente harás. En el tema que me compete, por ejemplo, hay muchas personas que saben muchísimo acerca de alimentación y nutrición. Incluso tienen diplomados, maestrías y doctorados. Sin embargo, no llevan a la práctica todo ese conocimiento. Confunden conocimiento con sabiduría. Piensan que estudiando más, buscando más teorías, más información o haciendo más cursos o carreras cambiarán sus conductas. Es uno de los grandes errores del sistema educativo mundial, usar el cerebro como biblioteca de datos en lugar de enseñarnos a comprenderlo, a estudiarlo, a saber por qué piensa como piensa o hace lo que hace. Decía Sócrates: "la mayoría de las personas pasan toda una vida dormidos, sin siquiera haber despertado". Y es así, la mayoría no se detiene a cuestionarse a sí mismo, a pensar, a desafiar sus creencias. Así como nacen se mueren llevados por la corriente de la vida. ¿Tú serás igual?

La idea con este artículo es invitarte a pensar. En Venezuela, por ejemplo, estamos viviendo una
situación "interesante" que ha hecho que muchos nos detengamos a reflexionar. En mi caso como profesional de la salud (nutricionista), me he dado cuenta que muchas de las cosas que pensaba que sabía realmente no eran ciertas. La teorías bonitas o conocimientos rebuscados (de esos que hablamos los profesionales de la salud para hacernos parecer interesantes y sabios) no sirven en tiempos de crisis. Por eso, si yo he podido aprender y desaprender en esta situación, tú también puedes. Aceptas que no es nada externo lo que debe cambiar, sino tú mismo(a). Si quieres alcanzar un determinado peso o salud pues alcánzalo. Si no te gusta la dieta que haces pues cámbiala. Si no te gusta el médico o nutricionista que te atiende pues búscate otro. Pero también recuerda que si crees que puedes, podrás. Y si crees que no puedes, pues no podrás, aunque te atienda el nutricionista de los astronautas del Apolo 8.

Lo que te limita es tu propia mente. Es lo que te ha dicho e incluso lo que te está diciendo precisamente ahora. Quizá lo que te limita es el ego. Pensar que no necesitas nada de nadie. Pensar que todo está en buscar más información. Pensar que el problema tuyo depende de otro. Y te comprendo, muchos profesionales de la salud tenemos un ego alto. Pensamos que lo sabemos todo. Que después de Dios venimos nosotros. Quizá porque creemos que tenemos la salud y la vida de la gente en nuestras manos. Deja ir al ego y verás cómo progresas. Déjate ayudar porque muchas veces el exceso de peso que tienes es realmente ego o miedo retenido. Al disminuir el ego disminuye el peso.